REPERT MED CIR. 2022;31(3):230-241
230
de Medicina y Cirugía
INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO
SSN: 0121-7372 • ISSN electrónico: 2462-991X
Historia del artículo:
Fecha recibido: abril 5 de 2021
Fecha aceptado: septiembre 8 de 2021
Autor para correspondencia:
Juan Pablo Castañeda González:
jpcastaneda@fucsalud.edu.co
DOI
10.31260/Repert Med Cir.01217372.1160
Juan José Diaztagle MDa
Julián Ernesto Canal Forerob
Juan Pablo Castañeda Gonzálezb
a Servicio de Medicina Interna, Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud, Hospital de San José, Departamento de Ciencias Fisiológicas,
Facultad de Medicina Universidad Nacional de Colombia. Bogotá DC, Colombia.
b Facultad de Medicina, Semillero de investigación de Medicina Interna, Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud, Bogotá DC,
Colombia.
Introducción: la hipertensión arterial es una de las principales enfermedades a nivel mundial y constituye una importante
causa de morbilidad y mortalidad para países de bajos y medianos ingresos. Objetivo: determinar la importancia epidemiológica
de la hipertensión arterial como factor de riesgo cardiovascular en diferentes estudios realizados a nivel mundial, en
Latinoamérica y Colombia. Metodología: se realizó una búsqueda de la literatura cientíca en las bases de datos de PudMed/
Medline, Scielo, LILACS, así como también en revistas médicas y textos publicados por el Ministerio de Salud y Protección
Social de Colombia. Discusión y conclusiones: más de 90% de los pacientes hipertensos padecen la forma primaria de la
enfermedad, la cual está asociada con un aumento de la resistencia vascular periférica. Las características socioeconómicas de
los países y el nivel educativo individual se relacionan con la prevalencia y el manejo adecuado de esta patología. El aumento
en la prevalencia de las enfermedades crónicas, sumado a eventos históricos de importancia, fueron determinantes para el
desarrollo de estudios epidemiológicos mundiales como el Framingham Heart Study.
R E S U M E N
Hipertensión arterial y riesgo Hipertensión arterial y riesgo
cardiovascularcardiovascular
Hypertension and cardiovascular riskHypertension and cardiovascular risk
Artículo de revisión
de Medicina y Cirugía
Vol.
31
N°3 . 2022
231
REPERT MED CIR. 2022;31(3):230-241
de Medicina y Cirugía
ABSTRACT
Introduction: hypertension is one of the leading medical conditions worldwide and is an important cause of morbidity
and mortality in low and middle-income countries. Objective: to determine the epidemiological importance of hypertension
as a risk factor for cardiovascular diseases (CVD) in dierent studies carried out in the world, Latin America and Colombia.
Methodology: a search of the scientic literature using the PudMed / Medline, Scielo, LILACS databases, as well as the medical
journals and texts published by the Colombian Ministry of Health and Social Protection. Discussion and conclusions: more
than 90% of hypertensive patients have primary hypertension, which is associated with increased peripheral vascular
resistance. Prevalence and adequate management of hypertension are related with the socioeconomic characteristics of
countries and individual educational level. The increase in prevalence of chronic diseases together with important historical
events, were determinant for the development of worldwide epidemiology studies such as the Framingham Heart Study.
Diverse studies aimed to gather information on hypertension showing alarming gures in terms of awareness, treatment and
control of this condition, have been conducted in Latin America and Colombia. Thus, it is necessary to perform programs
for detecting hypertension, in order to design strategies to enable signicant reduction of CVD.
Key words: cerebrovascular accident, coronary disease, heat diseases, epidemiological studies, risk factors, hypertension.
© 2022 Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud - FUCS.
This is an open access article under the CC BY-NC-ND license (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
INTRODUCCIÓN
En América Latina y en Colombia se han realizado diferentes estudios que permiten establecer datos relacionados con la
hipertensión arterial, demostrando cifras alarmantes en cuanto al conocimiento, tratamiento y control de esta condición, por
lo cual, surge la necesidad de establecer programas para la detección de pacientes hipertensos con el n de generar estrategias
que disminuyan de manera signicativa las enfermedades cardiovasculares.
Palabras clave: accidente cerebrovascular, enfermedad coronaria, enfermedades cardíacas, estudios epidemiológicos, factores de riesgo,
hipertensión.
© 2022 Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud - FUCS.
Este es un artículo Open Access bajo la licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
La presión arterial (PA) es la fuerza que ejerce la sangre
sobre cualquier área de la pared vascular.1 Desde el punto
de vista hemodinámico y teniendo en cuenta la ley de
Ohm, la PA depende de dos variables siológicas: ujo
sanguíneo y resistencia vascular periférica. Su regulación
está determinada por complejos sistemas siológicos de
retroalimentación a corto y largo plazo. La alteración de
estos puede desencadenar la pérdida del control de las cifras
tensionales y su elevación persistente, deteriorando así la
salud de los pacientes.2
La hipertensión arterial (HTA) es un problema de salud
pública que afecta millones de personas a nivel mundial
muchas de las cuales desconocen su condición, razón por la
cual puede llegar a generar desenlaces fatales sin presentar
manifestaciones previas.3 La Organización Mundial de la
Salud (OMS) dene la HTA como un trastorno en el que los
vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta,
la cual puede llegar a dañarlos.4 El Colegio Americano de
Cardiología (ACC, por sus siglas en inglés) y la Asociación
Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés)
establece la HTA con valores de PA ≥130/80 mm Hg5,
mientras que la Sociedad Europea de Cardiología (ECS,
por sus siglas en inglés) la dene con valores ≥140/90 mm
Hg.6 Entre 90 y 95% de los pacientes con esta condición
se clasican como hipertensos esenciales o primarios, los
cuales se vinculan con factores relacionados al aumento de
la resistencia vascular periférica.
Solo 5 a 10% de los pacientes presentan HTA secundaria
relacionada con una patología de base que genera el
trastorno.7 El concepto de riesgo cardiovascular está
estrechamente relacionado con el de HTA. Se dene factor
de riesgo como cualquier rasgo, característica o exposición
que tiene un individuo y que aumenta la probabilidad de
sufrir una enfermedad. El riesgo cardiovascular también está
relacionado con la edad, el sedentarismo, la dislipidemia, el
tabaquismo y la obesidad.4
En esta revisión, se presenta un panorama de cómo la
HTA a lo largo de la historia, se estableció como uno de los
factores de riesgo cardiovascular más importante, también se
describen los estudios epidemiológicos de mayor relevancia
que se han llevado a cabo en el mundo, en Latinoamérica y
Colombia.
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LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL
COMO RIESGO CARDIOVASCULAR
A mediados del siglo XX hubo una transición
epidemiológica de las enfermedades. Antes de este periodo,
la mortalidad dependía de las enfermedades infecciosas
hasta el descubrimiento de los antibióticos como la
penicilina, dejando así a las enfermedades crónicas como la
principal causa de morbimortalidad.8,9 Este cambio coincidió
con la muerte de grandes líderes mundiales e incentivó la
realización de diversos estudios epidemiológicos con el n
de prevenir la morbimortalidad cardiovascular. El estudio
Framingham del corazón marcó el punto de partida hacia
el enfoque de los factores de riesgo en la enfermedad
cardiovascular.
FRAMINGHAM HEART STUDY
(FHS)
Para el año de 1932, en la campaña presidencial de los
Estados Unidos, los registros médicos del candidato Franklin
Delano Roosevelt indicaron una PA de 140/100 mm Hg,
cifras que para el momento no representaba ninguna alarma
ya que se pensaba que, a mayor presión, mayor perfusión en
los tejidos. Entre 1935 y 1941 se registraron cifras hasta de
188/105 mm Hg ante lo cual, su médico personal rerió que
“no es más de lo normal para un hombre de su edad”. En
1944, en pleno desarrollo de la segunda guerra mundial, el
ahora presidente Roosevelt fue llevado por su hija al hospital
naval de Bethesda en Maryland por presentar disnea de
esfuerzo, diaforesis y distensión abdominal. Su cardiólogo
registró una PA de 186/108 mm Hg, ligera cianosis y un
aumento en la silueta cardiaca en la radiografía de tórax,
razón por la cual se le diagnosticó HTA e insuciencia
cardiaca.10 En febrero de 1945 en la conferencia de Yalta,
Ucrania, en reunión con Winston Churchill y Joseph Stalin,
el médico personal de Churchill escribió en su diario: “El
presidente Roosevelt parece un hombre muy enfermo, él
tiene todos los síntomas de endurecimiento de las arterias…
Le doy solo unos pocos meses de vida”. Dos meses después,
el 12 de abril de 1945 el presidente Roosevelt falleció a los 63
años a consecuencia de una hemorragia cerebral ocasionada
por una PA de 300/190 mm Hg.10 Tres años más tarde, el
presidente electo Harry Truman rmó la “ley nacional
del corazón”, en donde el congreso de los Estados Unidos
armó: “La nación se encuentra seriamente amenazada
por las enfermedades del corazón y la circulación… son
la principal causa de muerte en los Estados Unidos”. Por
esta razón se creó el Instituto Nacional del Corazón (ahora
llamado Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre
– NHLBI) y se asignó un presupuesto de 500.000 dólares
para un estudio epidemiológico sobre el corazón y sus
enfermedades, dando origen al Framingham Heart Study.10
El FHS es un estudio epidemiológico longitudinal cuyo
principal objetivo fue la identicación precoz de los factores
individuales que se podrían relacionar con las enfermedades
cardiovasculares en personas en apariencia sanas.10,11 La
primera cohorte se realizó entre 1948 y 1952 con un total
de 5.209 participantes, hombres y mujeres entre 30 y 69
años de la ciudad de Framingham, Massachusetts. En la
actualidad ya se han realizado 6 cohortes del estudio a lo
largo de 71 años con un total de 15.447 participantes de
tres generaciones diferentes.10 El primer dato relevante
del estudio sobre la HTA fue publicado en 1957 cuando
se reportó un aumento de 4 veces más la incidencia de la
enfermedad coronaria en pacientes hipertensos comparados
95
91
87
83
79
75
PAD (MMHG)
30 - 34
35 - 39
40 - 44
45 - 49
50 - 54
55 - 59
60 - 64
65 - 69
70 - 74
75 - 79
80 - 84
EDAD (AÑOS)
Hombres PAD Mujeres PAD
90
80
70
60
50
40
PRESIÓN DE PULSO (MMHG)
30 - 34
35 - 39
40 - 44
45 - 49
50 - 54
55 - 59
60 - 64
65 - 69
70 - 74
75 - 79
80 - 84
EDAD (AÑOS)
Hombres Mujeres
Fuente: modificada de la referencia (20).
175
165
155
145
135
125
115
PAS (MMHG)
30 - 34
35 - 39
40 - 44
45 - 49
50 - 54
55 - 59
60 - 64
65 - 69
70 - 74
75 - 79
80 - 84
EDAD (AÑOS)
Hombres PAS Mujeres PAS
Figura 1. Cambios en la presión arterial sistólica, diastólica y
de pulso con relación a la edad y sexo. Fuente: modicada de las
referencias (10,11). PAS: presión arterial sistólica; PAD: presión
arterial diastólica.
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Tabla 1. Factores de riesgo para IAM a nivel mundial
distribuido por sexo
OTROS ESTUDIOS
EPIDEMIOLÓGICOS DE RIESGO
CARDIOVASCULAR
Posterior a los primeros reportes del estudio Framingham,
se diseñaron otros estudios que evaluaron la importancia
de diferentes factores de riesgo cardiovascular. Monitoring
Trends and Determinants in Cardiovascular Disease
(MONICA), fue un proyecto propuesto por la OMS que se
realizó entre 1979 y 2002, similar al estudio de Framingham
con personas entre 25 y 64 años de ambos sexos. En el
estudio participaron aproximadamente 15 millones de
personas en 21 países. No participaron países de África,
Centroamérica, Suramérica y gran parte de Asia, pues no
contaban con registros epidemiológicos aceptables, lo cual
podía afectar la conabilidad de los resultados. El principal
objetivo fue medir las tendencias y determinantes de la
mortalidad cardiovascular y determinar su relación con los
factores de riesgo conocidos.17 Los resultados publicados,
conrmaron que la HTA es un factor de riesgo coronario
y cerebrovascular importante.18 En el estudio se utilizó a la
PAS para comprobar la hipótesis nula: “no hay relación entre
las tendencias a 10 años en el colesterol sérico, la presión
arterial y el consumo de cigarrillo, y las tendencias a 10 años
en las tasas de incidencia de enfermedad coronaria"; esta
Posteriormente se realizó un estudio similar que evaluó
los factores de riesgo para accidente cerebrovascular (ACV).
La iniciativa INTERSTROKE tuvo como principal objetivo
determinar la asociación entre factores de riesgo conocidos
y emergentes con el ACV isquémico y hemorrágico.21 Este
fue un estudio multicéntrico de casos y controles realizado
entre 2007 y 2010 en 22 países de altos, medianos y bajos
ingresos, incluyendo a Colombia. Participaron 3.000 casos
(pacientes con primer ACV agudo) y 3.000 controles. En
los resultados, los factores de riesgo para ACV isquémico
fueron: tabaquismo (OR 2.32 - IC 99% 1.91-2.81), estrés
psicosocial (OR 1.30 - IC 99% 1.04-1.62) y diabetes (OR
1.69 - IC 99% 1.29-1.99); mientras que la actividad física
regular fue un factor protector con un OR de 0.68 (IC 99%
con personas sanas. Después, en 1961 se introdujo el
concepto “factores de riesgo”, en donde no solo se estudió
la HTA sino también factores como tabaquismo, obesidad,
edad, sexo, entre otros.10 Otras publicaciones en la década de
los setenta mostraron que la presión arterial sistólica (PAS)
tenía un vínculo más fuerte que la presión arterial diastólica
(PAD) en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares
como la enfermedad coronaria, enfermedad cerebrovascular
(ECV) e insuciencia cardiaca (IC), siendo esta última la de
mayor grado de asociación.12 60% de los pacientes con IC
presentaban enfermedad hipertensiva sola o en combinación
con enfermedad coronaria.10 Solamente 2 de cada 5 hombres
vivían más de 5 años después del diagnóstico de IC, y 1 de
cada 5 más de 10 años.11-13 Otro informe relevante publicado
en 1997 demostró que los hombres entre los 30 y 60 años
tenían una PAS más elevada que las mujeres, pero que las
mujeres entre los 65 y 80 años superaron a los hombres en
estos mismos valores. Sin embargo, esto no pasaba con la
PAD en donde los dos géneros tenían un comportamiento
similar, pero con tendencia a disminuir según aumentaba la
edad, lo cual explicaba un aumento en la presión de pulso
en edades mayores (gura 1).14,15
Un año más tarde, se publicó el “perl de riesgo de
Framingham” para estimar el riesgo de padecer una
enfermedad cardiovascular a 10 años, en donde se tienen
en cuenta factores como sexo, edad, PA, perl lipídico
y tabaquismo.16 La escala de riesgo de Framingham
es una herramienta muy útil para estraticar el riesgo
cardiovascular en pacientes de prevención primaria.11
hipótesis fue rechazada.19 Si bien el estudio de Framingham
hizo referencia a que la PAS tenía un vínculo más fuerte
que la PAD en el desarrollo de la enfermedad, el estudio
MONICA consideró que las dos tienen igual importancia
como factor de riesgo que predispone a la enfermedad
cardiovascular.19 Tras 10 años de seguimiento se encontró
que las cifras de PA disminuyeron en pacientes hipertensos
de ambos sexos. Esto se atribuyó a cambios en el estilo de
vida, ejercicio y dieta saludable propuestos por el estudio.19
Otra investigación importante fue INTERHEART, un estudio
de casos y controles realizado entre 1999 y 2003. Incluyó
29.972 participantes de 52 países, seis latinoamericanos
incluyendo Colombia. El principal objetivo fue establecer
la asociación entre HTA, tabaquismo, diabetes, obesidad
abdominal, estrés psicosocial, consumo de alcohol,
dislipidemia y el infarto agudo de miocardio (IAM) como
desenlace primario.20 En los resultados se encontró que,
para ambos sexos, la dislipidemia (OR 3.3 - IC 99% 2.8-
3.8), el tabaquismo (OR 2.9 - IC 99% 2.6-3.2), la diabetes
(OR 2.4 - IC 99% 2.1-2.7) y la HTA (OR 1.9 - IC 99% 1.7-
2.1) se relacionaron de forma signicativa con el desenlace.
Las personas con HTA, tabaquismo y diabetes en conjunto
tuvieron un OR de 13.0 (IC 99% 10.7-15.8), mientras
que, padecer todos los factores de riesgo simultáneamente
incrementó el OR a 129.2 (IC 99% 90.2-184.9) (tabla 1).20
Tabaquismo
Diabetes
Hipertensión
Obesidad abdominal
Estrés psicosocial
Consumo regular de
frutas/vegetales
Ejercicio
Consumo de alcohol
Dislipidemia
Mujeres
OR (IC 99%)
2.86 (2.36–3.48)
4.26 (3.51–5.18)
2.95 (2.57–3.39)
2.26 (1.90–2.68)
3.49 (2.41–5.04)
0.58 (0.48–0.71)
0.48 (0.39–0.59)
0.41 (0.32–0.53)
4.42 (3.43–5.70)
Hombres
OR (IC 99%)
3.05 (2.78–3.33)
2.67 (2.36–3.02)
2.32 (2.12–2.53)
2.24 (2.03–2.47)
2.58 (2.11–3.14)
0.74 (0.66–0.83)
0.77 (0.69–0.85)
0.88 (0.81–0.96)
3.76 (3.23–4.38)
Factores de riesgo
Fuente: modificada de la referencia (20).
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0.51-0.91). Para el ACV de tipo hemorrágico, los factores
más signicativos fueron HTA (OR 3.80 - IC 99% 2.96-
4.78), relación cintura-cadera (OR 1.65 - IC 99% 1.22-2.23),
dieta (OR 1.53 - IC 99% 1.13-2.08), consumo de alcohol (OR
1.52 - IC 99% 1.07-2.16) y estrés psicosocial (OR 1.23 - IC
99% 0.89-1.69). El estudio hace énfasis en que la HTA es
el factor de riesgo más susceptible a cambios en entornos
de bajos ingresos, ya que su detección no requiere equipos
sosticados ni atención especializada a la hora de tomar la
PA. Además, se puede reducir con cambios en el estilo de
vida, disminución en la ingesta de sal y medicamentos de
bajo costo.21
ASPECTOS EPIDEMIOLÓGICOS
DE LA HTA.
PERSPECTIVA MUNDIAL
Según la OMS, la prevalencia global de HTA en el mundo
es de 20 a 25%, datos que varían dependiendo del sexo,
edad y diversos factores socioeconómicos. Para 2019 se
registraron 1.130 millones de personas con HTA. Más de
dos tercios de los pacientes hipertensos viven en países en
desarrollo, donde se suman diversos factores ambientales
que aumentan la incidencia de la enfermedad (bajo nivel
educativo, alto costo de los medicamentos, acceso limitado
a servicios de salud, estrés psicosocial, entre otros).22
Los factores genéticos y la historia familiar también son
importantes y deben tenerse en cuenta en la epidemiología
de la HTA. Aproximadamente un 60% de las cifras de PAS
y 67% de la PAD poseen rasgos heredables. Se han descrito
más de 100 locus asociados con la HTA en más de 300.000
individuos evaluados.23 También se han encontrado alelos
asociados con determinadas respuestas al tratamiento
antihipertensivo.24 En Estados Unidos la prevalencia de
HTA para 2016 fue de 46% en promedio para ambos sexos
en personas mayores de 20 años.25 En edades entre los 20
a 44 y 45 a 64 y mayores de 65 años, la prevalencia fue de
26,1%, 59,2% y 78,2% respectivamente.26 Según datos de
la NHANES (National Health and Nutrition Examination
Survey), 82,7% de los pacientes hipertensos mayores de 20
años estaban enterados de su diagnóstico y cerca de 75%
tomaban tratamiento antihipertensivo.27 En ese país, el
costo anual destinado de forma directa e indirecta para la
HTA entre 2014 y 2015, fue de más de 55 mil millones de
dólares.28 Por cada paciente hipertenso sin comorbilidades se
calcula un costo de atención de 3.914 dólares al año. En caso
de presentarse tres o más comorbilidades el costo aumenta
a más 13.000 dólares.29 La situación de la HTA en Europa
varía según el país o la zona del continente analizada.
Mientras que en países como Francia y Alemania las cifras
promedio de PAS han disminuido en forma importante entre
1990 y 2014, en otros países como Polonia o Albania esta
tendencia es mucho menor.6,30 En Europa central y oriental la
prevalencia de HTA en adultos ha sido reportada entre 30 y
45%, la cual es mayor que en países de Europa occidental.6,30
Datos del Epidemiological Study of European Cardiovascular
RiskPatients: Disease Prevention and Management in Usual
Daily Practice (EURIKA), indicaronque la prevalencia de
HTA no controlada en este continente se encontraba entre
38,6 y 59,7%. Solo 25,2% de estos pacientes tomaban tres o
más medicamentos antihipertensivos.30
Estudios realizados alrededor del mundo han demostrado
que la prevalencia de HTA es mayor en países de medianos y
bajos ingresos. Para 2010 la prevalencia en países de ingresos
altos se calculó en 28,5%, mientras que en los de ingresos
medio-bajo en 31,5%.31 Un análisis conjunto que evaluó
1.479 estudios poblacionales entre 1975 y 2015, mostró que
los países con mayores cifras de PA han cambiado a países
de bajos ingresos en el sur de Asia y África subsahariana,
pero se han mantenido altas en países de Europa central y
occidental, mientras que han disminuido en países de altos
ingresos.32 Geldsetzer y cols. analizaron datos de 44 países
de medianos y bajos ingresos, concluyendo que el manejo
que se tiene sobre la HTA es deciente. Menos de la mitad
de los pacientes con HTA fueron diagnosticados, menos de
un tercio recibía medicamentos antihipertensivos y solo 1
de cada 10 tenía control de su PA.33 También se ha descrito
que los pacientes con educación superior tienen una tasa de
incidencia dos veces menor en comparación con las personas
con menor nivel educativo, este fenómeno se incrementa
aún más en la población femenina.34 Uno de los estudios
importantes que evidenciaron un panorama distintivo de la
HTA en diversos países según su nivel de ingreso económico
fue el PURE (Prospective Urban Rural Epidemiology Study),
un estudio que involucró 142.042 pacientes entre los 35 y
70 años en el cual participaron 17 países de bajos, medianos
y altos ingresos.35 La prevalencia de HTA ajustada a valores
estandarizados de edad y sexo fue de 27,7%. Entre los
hipertensos, 46,5% tenían conocimiento de su condición,
87,5% recibían medicación y solo 32,5% cursaba con
cifras tensionales controladas. En el ámbito urbano
los pacientes hipertensos tenían mayor conocimiento,
prescripción de medicamentos y control de su enfermedad
en comparación con aquellos que vivían en zonas rurales.36
En los países de bajos ingresos, el tratamiento y el control
de los hipertensos fue mayor en las áreas urbanas (41,5% y
12,4%), en comparación de las zonas rurales (28,4% y 5,4%
respectivamente). Las mujeres tuvieron mayor conciencia
de su condición, tratamiento y control en comparación con
los hombres. Se pueden observar los datos completos en
las tablas 2 y 3.36 Los medicamentos más usados fueron los
antagonistas del receptor de angiotensina II (ARAII) (13,9%),
inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina
(IECAS) (13,3%), beta-bloqueadores y calcio antagonista
con 8,2% y diuréticos con un 7%. Solo 12% entre todos los
diagnosticados recibían terapia dual; los países de ingresos
altos la incluían en 18,1%, mientras que en los de ingresos
medio-alto y medio-bajo la incluían en 14%. Las mujeres,
las personas mayores, los habitantes de regiones urbanas
y quienes tenían mejor nivel educativo, también tuvieron
235
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Tabla 3. Comparación entre la prevalencia, conocimiento, tratamiento y control según región,
sexo y grupo etario en países de ingresos medio-bajos.
Variable
Región
Sexo
Nivel educativo
Edad
Urbano
34,9
Mujer
36,1
Bajo
39,8
Joven
24,1
Rural
38,7
Hombre
37,3
Alto
34,6
Mayor
50,8
Urbano
49,3
Mujer
47,7
Bajo
41,5
Joven
31,4
Rural
37,8
Hombre
39,7
Alto
46,2
Mayor
49,4
Urbano
41,5
Mujer
39,8
Bajo
33,6
Joven
23,2
Rural
28,4
Hombre
30,2
Alto
39,5
Mayor
41,3
Urbano
12,4
Mujer
10,0
Bajo
8,4
Joven
6,3
Rural
5,4
Hombre
8,0
Alto
11,4
Mayor
9,9
% Prevalencia % Conocimiento % Tratamiento % Control
Nivel educativo bajo: sin ningún estudio o con básica primaria escolar; nivel educativo alto: estudio universitario o equivalente;
mayor: ≥ 50 años; joven < 50 años. Fuente: modificada de la referencia (36).
Tabla 2. Prevalencia del conocimiento, tratamiento y control de pacientes con HTA en el estudio PURE
PAI: países con ingresos altos; PMAI: países con medio-alto ingreso; PMBI: países con medio-bajo Ingreso; PBI: países con ingresos
bajos. Fuente: modificada de la referencia (36).
Variable
Ingreso económico PAI
n=6 263
PMAI
n=18 123
PMBI
n=23 269
PBI
n=10 185
% Conocimiento
49,0
52,5
43,6
40,8
% Tratamiento
46,7
48,3
36,9
31,7
% Control
19,0
15,6
9,9
12,7
% Controlados con Tratamiento
40,7
32,3
26,9
40,2
Fuente: modificada de la referencia (20).
PERSPECTIVA EN LATINOAMÉRICA
mayor utilización de dos o más antihipertensivos.36 El
estudio PURE resaltó que, aunque se inicie tratamiento muy
pocas veces se logra un control adecuado. En aquellos países
con ingresos medio-bajo y bajo, el conocimiento, tratamiento
y control de la enfermedad se encontró muy reducido,
en especial en las regiones rurales.37 Principalmente se
requieren intervenciones no farmacológicas que mejoren el
estilo de vida. La educación es un factor signicativo que
puede mejorar el pronóstico y el control de los pacientes
hipertensos.36
En Latinoamérica (LA), se ha descrito que la HTA afecta
entre 20 y 40% de los adultos latinos y se relaciona con 1.6
millones de muertes anuales por enfermedad cardiovascular,
de las cuales 500.000 ocurren antes de los 70 años.38
Diversos estudios han evaluado aspectos epidemiológicos
de la HTA para la región; se hará referencia particular a
cuatro de ellos. El primero es el Cardiovascular Risk Factor
Multiple Evaluation in Latin America (CARMELA), un
estudio epidemiológico transversal que se realizó entre
2003 y 2005 en siete ciudades de Latinoamérica que incluyó
11.548 participantes entre 25 y 64 años. La prevalencia
global de HTA fue de 16,3%. Bogotá y Quito fueron las
ciudades que mejores presiones arteriales obtuvieron y
menor riesgo cardiovascular presentaron en comparación
con las restantes.39 Se observó que hasta 50% de los casos
el diagnóstico era desconocido y menos de la mitad de
los diagnosticados acudían a controles adecuados. Cerca
de 50% de todos los participantes registraron cifras
tensionales normal-alta o HTA, lo que signica que la mitad
de la población requiere cambios radicales en el estilo de
vida para prevenir la morbimortalidad de la enfermedad
cardiovascular.39 El segundo estudio es el informe publicado
sobre los datos del INTERHEART para Latinoamérica40,
donde la prevalencia de HTA fue de 29%, diez puntos
porcentuales por encima de los demás países en el resto del
mundo. La obesidad, la dislipidemia, la HTA y la diabetes
fueron los factores de riesgo más importantes para el IAM. La
HTA fue un factor de riesgo cardiovascular más importante
en mujeres con un OR de 3.68 (IC 95% 2.69-5.05) en
comparación con los hombres (OR 2.55 - IC 95% 2.11-3.08).40
REPERT MED CIR. 2022;31(3):230-241
236
de Medicina y Cirugía
Tabla 4. Factores de riesgo cardiovascular en la región latinoamericana
Tabla 5. Prevalencia, conocimiento, medicación y control de pacientes con HTA en los estudios CARMELA, PURE Y MMM
Factores de riesgo
Dislipidemia
Tabaquismo
Diabetes
Hipertensión
Obesidad abdominal
Depresión
Estrés
Ejercicio regular
Alcohol
Consumo habitual
de frutas y vegetales
Argentina
OR*
5.52
(2.8–10.7)
2.33
(1.5–3.7)
2.73
(1.5–5.1)
2.62
(1.7–4.1)
4.22
(2.3–7.8)
1.12
(0.7–1.7)
4.17
(1.5–11.3)
0.46
(0.3–0.8)
0.85
(0.6–1.3)
1.10
(0.7–1.9)
Brasil
OR*
3.3
(1.9–5.8)
2.4
(1.7–3.4)
4.2
(2.5–7.1)
4.4
(3.0–6.3)
2.5
(1.4–4.6)
1.48
(1.0–2.2)
8.0
(3.7–17.3)
0.8
(0.5–1.3)
0.7
(0.4–1.0)
0.7
(0.4–1.0)
Chile
OR*
2.05
(1.4–3.0)
3.10
(2.3–4.2)
2.0
(1.4–2.9)
2.86
(2.1–3.9)
1.26
(0.8–1.9)
0.95
(0.7–1.3)
2.19
(1.3–2.8)
0.82
(0.6–1.2)
1.20
(0.8–1.7)
0.54
(0.4–0.8)
Colombia
OR*
2.49
(1.4–4.3)
1.44
(1.0–2.0)
1.74
(1.1–2.7)
2.27
(1.6–3.2)
4.16
(2.7–6.5)
1.21
(0.9–1.7)
1.87
(1.1–3.3)
0.75
(0.5–1.1)
0.92
(0.6–1.5)
0.84
(0.6–1.3)
Resto del mundo
OR*
3.0
(2.8–3.3)
2.26
(2.1–2.4)
3.16
(2.9–3.49)
2.41
(2.3–2.6)
2.22
(2.1–2.4)
1.60
(1.5–1.7)
2.10
(1.8–2.4)
0.70
(0.65–0.76)
0.78
(0.74–0.84)
0.78
(0.73–0.84)
*Intervalo de confianza 99%. Fuente: modificada de las referencias (20,40).
Estudio
CARMELA
PURE
MMM
Ciudad/País
Bogotá
Santiago de Chile
Buenos Aires
Ciudad de México
Argentina Urbano
Rural
Brasil Urbano
Rural
Chile Urbano
Rural
Colombia Urbano
Rural
Perú Urbano
Rural
Uruguay Urbano
Rural
Latinoamérica
Colombia*
% Prevalencia
13,4%
23,8%
29%
11,7%
49,5%
49,6%
52,9%
50,9%
45,5%
45,7%
40,3%
34,9%
18,6%
13%
47,7%
40,4%
26,7%
% Conocimiento
68,8%
60,1%
64,1%
75,7%
57,9%
53,1%
64,2%
66,7%
62,3%
64,6%
56,2%
47,8%
66,4%
23,8%
70,8%
69,9%
% Tratamiento
7,3%
10,3%
12,1%
7,6%
51%
50,5%
62,4%
63,6%
53,3%
62,1%
52,2%
41,1%
55,1%
9,5%
60,6%
65%
% Control
30,6%
20,3%
18%
41%
17,2%
14,1%
23,6%
22,9%
23,5%
28%
21,5%
13,3%
33,9%
7,9%
27%
61,5%
66,3%
Datos no disponibles en los estudios; *Datos obtenidos de MMM 2018. Fuente: modificada de las referencias (39,41,44,51).
237
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de Medicina y Cirugía
PERSPECTIVA EN COLOMBIA
Colombia ha participado en diferentes estudios
internacionales y también ha realizado diversos estudios
locales que han aportado información relevante acerca de
nuestra población. En el estudio INTERHEART el país
participó con 825 pacientes, y los factores de riesgo que más
se asociaron con IAM fueron la obesidad (OR 4.16 - IC 95%
2.7-6.5), la dislipidemia (OR 2.49 – IC 95% 1.4-4.3) y la HTA
(OR 2.27 IC 95% 1.6-2.2).40 El estudio PURE incluyó 7.485
pacientes de Colombia, la mitad de procedencia urbana y
64,1% fueron mujeres. Se encontró una prevalencia de HTA
de 37,5%. En pacientes con bajo nivel educativo se observó
un incremento de 25% en la prevalencia en comparación con
los de mejor nivel educativo.46 Entre los hipertensos, 51,9%
conocían su enfermedad y 77,5% recibían tratamiento.
Cerca de dos tercios de los pacientes con tratamiento
farmacológico no tenían control de su enfermedad y el uso
de medicación combinada fue muy bajo (27,5%).40,46
Entre 2014 y 2015 el Ministerio de Salud realizó la Encuesta
Nacional de Salud, Bienestar y Envejecimiento (SABE), que
tuvo como objetivo caracterizar la salud de las personas
mayores de 60 años a nivel geográco, sociodemográco y
económico, permitiendo generar indicadores en salud para
esta población. A partir de los datos obtenidos se realizaron
varios estudios enfocados al conocimiento epidemiológico
de la HTA que permitieron determinar la prevalencia,
conciencia, tratamiento y control de esta enfermedad.47 Uno
de estos incluyó 23.694 participantes provenientes de todas
las regiones del país, 54,5% eran mujeres. La prevalencia
de HTA fue de 57,7%, siendo mayor en mujeres (62,9%) en
comparación con los hombres (51,4%).48 Los participantes
con educación secundaria o universitaria tuvieron 37%
menos riesgo de padecer HTA en comparación de aquellos
sin educación académica. Adicionalmente, en los pacientes
con mejor poder adquisitivo se observó una reducción
de 44% en el riesgo de padecer HTA en comparación con
los menos favorecidos a nivel económico.49 93,9% de los
pacientes hipertensos fueron conscientes de su enfermedad
y 88,8% recibían medicación; de éstos, 50,1% estaban
controlados. El tipo de aliación al Sistema General de
Seguridad Social inuyó de forma signicativa en el
La HTA junto a la dislipidemia, el tabaquismo y la diabetes
tuvieron una mayor asociación estadística con el IAM en
adultos jóvenes en comparación con personas mayores; por
esto se debe prestar especial atención a aquellos hombres
menores de 55 años y mujeres menores de 65 años que
presenten alguno de los factores mencionados (tabla 4).20,40
La participación de LA en el estudio PURE fue de 33.276
personas de 6 países; 60% fueron mujeres y 32,1% provenía
de regiones rurales.41 La prevalencia de HTA ajustada
a valores estandarizados de sexo y edad fue de 41,7%,
siendo Brasil el país con mayor prevalencia con 52,2%. El
58,9% de los pacientes hipertensos tenían conocimiento
de su enfermedad y Brasil fue el país que mejores cifras
de conocimiento registró con 64,7%. Solo la mitad de los
pacientes hipertensos (53,3%) recibían tratamiento, la
mayoría de ellos con monoterapia. Los medicamentos más
utilizados fueron los IECA/ARAII (69,7%), seguido de los
diuréticos (30,5%) beta-bloqueadores (27,9%) y calcio-
antagonistas (14,5%). El país que mostró mejores tasas
de control en sus pacientes hipertensos con tratamiento
farmacológico fue Perú, con 62,1%. Los pacientes que vivían
en zonas urbanas tuvieron mejor conocimiento y control de
su enfermedad en comparación con los de áreas rurales. Se
encontró que aquellos pacientes con un alto nivel educativo
tenían más medicación y mejor control de su enfermedad,
en comparación de los de bajo nivel educativo.41,42
El cuarto estudio en mención es la iniciativa MMM (May
Measurement Month), estudio que surgió en mayo de
2017 y se desarrolla anualmente a nivel mundial por la
Sociedad Internacional de Hipertensión (ISH, por sus
siglas en inglés). El objetivo de esta iniciativa fue mejorar
la detección de la HTA, con el n de generar conciencia
sobre la PA a nivel individual y poblacional.43 Los datos
obtenidos buscan informar a los entes gubernamentales
sobre la importancia de realizar políticas sanitarias, con
el n de reducir la carga mundial de esta enfermedad. En
2017 los datos reportados para LA, vincularon 105.246
pacientes provenientes de Argentina (30,7%), Colombia
(21,1%), Venezuela (20,6%), Brasil (6,9%), Ecuador (6,6%),
Chile (4,5%), Uruguay (2,3%), Paraguay (1,1%) y México
(1,1%), 60% eran mujeres. La prevalencia global de HTA
fue de 40,4% y 38,5% de quienes estaban bajo tratamiento
no estaban controlados.44 Los pacientes hipertensos con
diabetes, tabaquismo o consumo frecuente de alcohol tenían
cifras mayores de PAS y PAD, en comparación con quienes
no padecen estas comorbilidades. Datos agrupados del
CARMELA, el PURE y del MMM para LA se muestran en
la tabla 5.
Una de las principales razones de la falta de adherencia
al tratamiento antihipertensivo en LA es el nivel
socioeconómico de estos países. Se ha documentado que
5 de cada 6 pacientes expresaron algún tipo de dicultad
económica a la hora de comprar los medicamentos, así
como también dicultad al acceso de los servicios de
salud o barreras administrativas y/o geográcas que limita
la asistencia a las citas de seguimiento. La dosicación
incorrecta, los efectos adversos y el olvido de la toma de
medicamentos, en especial en personas mayores, son otras
razones que intereren con la adherencia.45 Para mejorar
esta problemática, se demostró que el seguimiento de
los pacientes por parte del médico, la creación de grupos
multidisciplinarios, la asesoría personal y grupal, la
adecuada formulación de medicamentos y la promoción
de hábitos saludables, aumentó de manera considerable la
adherencia, reduciendo la PA y mejorando el control de la
HTA.45
REPERT MED CIR. 2022;31(3):230-241
238
de Medicina y Cirugía
CONCLUSIÓN
La HTA es un factor de riesgo cardiovascular importante.
Más de 90% de los pacientes poseen algún otro factor
de riesgo asociado. La mitad de los pacientes están
diagnosticados y de ellos, cerca de la mitad están mal
controlados. El adecuado conocimiento y control de la
enfermedad se relacionan con el nivel educativo y las
condiciones socioeconómicas. La correcta implementación
de acciones que ayuden a detectar y mitigar precozmente
estos factores de riesgo, puede contribuir a la reducción en
la incidencia y prevalencia de la enfermedad cardiovascular.
CONFLICTO DE INTERESES
Los autores declaran no tener ningún conicto de
intereses.
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ERC.57 Yáñez y cols. reportaron la prevalencia y mortalidad
por ECV en Colombia entre 2014 y 2016, encontrando que
los factores de riesgo más importante en ECV fueron la HTA
y el consumo de tabaco.58 Guerrero y cols. establecieron que
en personas menores de 55 años, los factores de riesgo que
se relacionaron de forma independiente con el diagnóstico
de enfermedad arterial coronaria fueron el uso de tabaco
y la HTA.59 Estos últimos estudios, en conjunto, ratican
la importancia de la HTA como riesgo cardiovascular en
nuestra población. Por último, en Colombia y Malasia
se llevó a cabo el estudio HOPE-4, una investigación en
donde se evaluó la ecacia de un modelo de cuidado que
involucraba a los trabajadores de la salud no médicos,
médicos generales y la familia, para la provisión de
medicaciones efectivas en la reducción sustancial del riesgo
cardiovascular.60 Incluyó 1.371 pacientes, de los cuales
entre 72 y 75% fueron hipertensos. El riesgo cardiovascular
según la escala de Framingham, disminuyó -6,4% en el
grupo de control y -11,1% en el de intervención; en este,
la PA disminuyó 11.4 mmHg más en comparación con el
control. El estudio concluye que este tipo de estrategias son
efectivas, pragmáticas y tienen potencial para reducir de
manera sustancial la enfermedad cardiovascular.60,61
control de la enfermedad. Aquellos con régimen especial
de aliación controlaban mejor su enfermedad (85,5%),
en comparación con los aliados al régimen contributivo
(53,6%) o al régimen subsidiado (43,3%).48 La iniciativa
MMM en Colombia incluyó en 2017 un total de 22.258
participantes de 11 departamentos, 55,8% eran mujeres y
22,8% tenían PA elevada. De los 18.644 participantes que
no estaban recibiendo medicamentos antihipertensivos,
1.637 (8,8%) eran hipertensos; mientras que de los
3.359 que recibían tratamiento, 961 (28,6%) no estaban
controlados.50 Estos hallazgos conrman la alta proporción
de pacientes hipertensos que desconocen su condición,
y de igual manera el bajo control de la PA pese a recibir
tratamiento farmacológico.50 En 2018 MMM incluyó 35.548
pacientes, 26,7% eran hipertensos, de los cuales, 11,3%
no estaban recibiendo tratamiento antihipertensivo, y
33,7% de los que tomaban medicamentos no tenía la PA
controlada (tabla 5).51 Los resultados obtenidos demostraron
la necesidad de establecer programas para la detección de
pacientes hipertensos con el objetivo de generar estrategias
para mitigar eventos cardiovasculares.52 Una fuente de
datos importante para el país es el Fondo Colombiano de
Enfermedades de Alto Costo, según el cual, la incidencia
de HTA en Colombia es de 9,9 por cada 1.000 habitantes.
En 2019 se presentaron 496.155 casos de hipertensión. El
promedio de edad de diagnóstico fue 61 años, y 58% eran
mujeres. La prevalencia actual en Colombia es 8,3%, con
cerca de 4 millones de pacientes hipertensos en el país.53 Las
ciudades con mayor prevalencia son Quibdó, Barranquilla y
Cartagena, y los departamentos más afectados son Risaralda,
Valle del Cauca, Antioquia, Bolívar y Caldas. La HTA es más
frecuente en mujeres, dato que se mantiene hasta edades
avanzadas.53,54 La enfermedad hipertensiva lidera la lista
de motivos de consulta en atención primaria en Colombia.
La tasa de mortalidad relacionada con la HTA se calcula en
150,8 y 173,1 por cada 100.000 habitantes, para hombres
y mujeres respectivamente. A su vez, los departamentos
que registraron mayores tasas de mortalidad fueron
Boyacá, Casanare, Meta, San Andrés y Vichada.53 Estudios
económicos en el país, reportaron un costo promedio
en el primer nivel de atención de $184.631 pesos para
2017.55 También se ha documentado un “gasto de bolsillo”
atribuible a la HTA de 147 dólares en promedio anual,
del cual, 76,7% fue dado por gastos no médicos directos,
en especial por requerimientos dietéticos como parte del
manejo no farmacológico y el transporte, resaltando la
importancia de tener en cuenta este tipo de gastos sobre
todo en los hogares más desfavorecidos, donde este costo es
mayor.56 Otros estudios han evaluado la HTA en otro tipo
de poblaciones y su relación con el riesgo cardiovascular.
El que evaluó 2.599.419 pacientes con enfermedad renal
crónica (ERC), HTA o diabetes reportados en la base de datos
de “la cuenta de alto costo”, mostró que en la población
con ERC, la prevalencia de HTA y/o diabetes fue 63% y
del total de los hipertensos en este estudio 38,1% tuvieron
239
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