177
de Medicina y Cirugía
REPERT MED CIR. 2023;32(2):173-178
grandes grupos, causas coronarias (MINOCA), no cardíacas
(embolia pulmonar, disección aórtica, sepsis, ACV) y
miocárdicas (miocarditis, taquiarritmias, cardiotoxinas).
11
La afectación miocárdica implica descartar síndrome
coronario agudo, de acuerdo con la presentación clínica
y la valoración de los factores de riesgo. En este punto, la
cRNM se recomienda para la conrmación del compromiso
miocárdico y descartar necrosis en ausencia de enfermedad
coronaria signicativa.
12
Este examen ha demostrado
incrementar el diagnóstico de miocarditis 6.3 veces cuando
se indica en pacientes que presentan síntomas similares
a angina y troponina elevada con enfermedad coronaria
excluida por angiografía.
13
La FA es el trastorno del ritmo cardíaco más común en la
práctica clínica
14
con una prevalencia en MCT en diferentes
series que va desde 2.5 hasta 14% y constituyen la segunda
arritmia más común entre los pacientes con MCT aguda,
siendo la taquicardia ventricular no sostenida la primera
en 28% de casos. Otras arritmias menos comunes son la
brilación ventricular, el bloqueo auriculoventricular de
cualquier grado y la taquicardia supraventricular sostenida.
4
Frustaci y col.
15
encontraron que en los pacientes con
brilación auricular aislada refractaria al tratamiento, la
biopsia endomiocárdica en 66% de los casos era compatible
con miocarditis.
Series como la de Subahi y col.
14
que estudió 6.642
pacientes con MCT aguda documentó que 9% (602) presentó
FA, siendo la edad un factor determinante sobre el desarrollo
de esta arritmia, con un promedio mucho mayor entre los
que desarrollaron FA, comparado con los que no lo hicieron,
con diferencias estadísticamente signicativas (59.2 vs. 42.3
años). La media de edad entre los pacientes con miocarditis
que cursaron con FA, fue de 59.2 ± 16.1, intervalo que está
acorde con la edad de los casos reportados en la actualidad.
Es llamativo que es más común encontrar el desarrollo
de esta arritmia entre quienes presentan comorbilidades
como enfermedad vascular periférica, hipertensión arterial
y diabetes; tal como el caso de nuestra primera paciente.
Cabe destacar que en la serie mencionada antes, quienes
desarrollaron FA tuvieron una mortalidad intrahospitalaria
mayor y riesgo alto de choque cardiogénico, taponamiento
cardíaco e injuria renal aguda.
14
El tratamiento oportuno
pudo haber evitado este tipo de desenlaces, tal como se ha
descrito en la literatura, en donde el tratamiento a tiempo
ayuda a prevenir la progresión de la enfermedad y por ende
a mejorar los resultados en este grupo de pacientes.
16
Aunque la miocarditis es más común en hombres
17
, en la
serie de Subahi el género no implicó una diferencia para el
desarrollo de FA.
14
La detección de la serología viral no está
recomendada en las guías internacionales para el diagnóstico
de miocarditis, puesto que es costosa, el informe de los
resultados es tardío y debería realizarse en la fase aguda de
la infección viral, lo que por lo regular no sucede porque
los pacientes consultan cuando ya ésta fase está resuelta.
18
La presencia de anormalidades de la motilidad global o
regional de la pared miocárdica que no está asociada con
una distribución coronaria es un hallazgo conrmatorio y
pronóstico útil de miocarditis aguda. La alteración de la
función ventricular derecha como en el segundo paciente,
es un fuerte predictor de muerte o necesidad de trasplante.
19
La MCT se ha asociado como causa de miocardiopatía
dilatada crónica en 40% de casos, lo que hace que su
tratamiento sea necesario.
20
En los casos que se informan, se
inició bloqueo neurohormonal por la presencia de brosis
independiente de la disfunción ventricular izquierda, que es
cuando por lo general se indica. Sin embargo, la iniciación
temprana de IECA o ARA II, ha demostrado atenuar el
remodelado cardíaco y la progresión a cardiomiopatía
dilatada. Los diuréticos como torasemida y beta-bloqueadores
en especial carvedilol, han demostrado reducir la progresión
de miocarditis en modelos murinos. Los antagonistas de
aldosterona, en especial eplerenone, resultaron en mejoría
del remodelado cardíaco por supresión de brosis.
20
La
colchicina por su parte ha demostrado tener características
antibróticas y protectoras endoteliales en estudios que
han reportado mejoría de los resultados en trastornos
inamatorios
21
, y mejora la supervivencia en este contexto.
22
El presente caso enmarca la etiología desencadenante de
la arritmia más comúnmente diagnosticada en urgencias y
abre camino a un espectro de diagnóstico diferencial ante
esta presentación. En los casos aquí descritos, la etiología
de la FA de novo fue la miocarditis, cuya causa estuvo
ligada a una infección viral reciente constituyéndose en el
diagnóstico de miocarditis viral como el más probable. Aún
existen limitaciones en cuanto al diagnóstico de MCT, pues
se hace necesario el acceso a estudios de imagen como la
cRNM que no está ampliamente disponible en nuestro país
y por ende retrasa el diagnóstico oportuno y el tratamiento
temprano que favorece así un mejor pronóstico. En cuanto
al tratamiento, es importante destacar el inicio temprano de
medicamentos como los usados en nuestros pacientes.
La MCT constituye un reto diagnóstico por su amplia
heterogeneidad de presentación que varía desde síntomas
leves o ausentes hasta arritmias fatales. La FA que es la
arritmia más común en el servicio de urgencias, puede ser
desencadenada por patología inamatoria, empeorando el
pronóstico de estos pacientes. Sospecharla como diagnóstico
diferencial ante FA de novo, favorece el tratamiento oportuno
y el impacto sobre el pronóstico adverso que pueden tener
estos pacientes en términos de mortalidad y morbilidad.
CONCLUSIONES