de Medicina y Cirugía
REPERT MED CIR. 2024;33(2):196-199
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La PE es un tipo de infección renal severa que resulta
en producción de gas en el parénquima, sistema colector o
tejido perirrenal. Esta se presenta casi en forma exclusiva
en adultos con diabetes mellitus, lo que explica por qué la
mayoría de las consideraciones etiopatogénicas, diagnósticas
y terapéuticas publicadas se reeren a este grupo de
pacientes. Desde el primer reporte en 1898 por Kelly y
MacCallum
1
, pocos han sido publicados en la literatura
pediátrica, El primer caso reportado de esta condición
en niños fue en 1985 en una escolar de 10 años, sometida
a dilataciones intermitentes por vejiga neurogenica.
4
Ambaram reportó dos casos; uno en un niño de 9 meses
de edad con septicemia por Escherichia coli y PE bilateral.
El otro paciente fue una preescolar de 2 años y 10 meses
con afectación bilateral e infección urinaria complicada,
portadora de VIH basado en la etapa 4 de la Organización
Mundial de la Salud y sospecha de tuberculosis por hallazgos
en la radiografía de tórax y por contacto epidemiológico
con personas enfermas.
5
Años después en 1998, Fernandes
y col.
6
publicaron 2 casos; un lactante masculino de 6
semanas con estenosis bilateral de la unión pieloureteral y
PE en ambos riñones y cistitis asociada. El otro paciente,
fue un escolar masculino de 12 años con PE en un riñón
trasplantado. Al-Makadma y col.
7
también reportan un caso
en un paciente pediátrico trasplantado. Mas recientemente,
se han reseñado en la literatura 2 casos en lactantes; uno
de 23 meses, sin historia previa de infecciones urinarias,
sometido a reimplante ureteral posterior a megaureter
obstructivo
8
y, otro de 7 meses, sin patologías urológicas
subyacentes, quien presentó PE posterior a sepsis por E coli
y quien fue sometido a drenaje percutáneo, no logrando
sobrevivir a la enfermedad.
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La mayoría de los autores
consideran que es una condición muy rara en la infancia,
10,11
lo cual coincide con nuestra experiencia, por ello nos vemos
motivados a difundir este caso. En la población pediátrica
que atendemos, la nefrolitiasis es una enfermedad
prevalente, lo cual podría condicionar a una incidencia más
elevada de PE, sin embargo hasta el momento este ha sido
el único caso diagnosticado por nosotros. La crepitación
al palpar la masa en anco derecho con sensación similar
a ensema subcutáneo fue denitiva para sospechar la
condición.
11, 12
Al igual que en otros trabajos, el ultrasonido
mostró lesiones hidronefróticas con contenido denso y aire
dentro del parénquima renal.
9,13
Aunque la tomografía se
considera el mejor procedimiento diagnóstico por Goldman
DISCUSIÓN
El estudio histológico mostró hallazgos compatibles con
pionefrosis y atroa renal. La evolución posoperatoria
fue satisfactoria, sin embargo, la niña reingresó 3 semanas
después de la cirugía por neumonía bacteriana. Es importante
destacar que la madre fue sometida a nefrectomía durante la
infancia por litiasis coraliforme.
y col.
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, en nuestra paciente no demostró la presencia de
gas, pero identicó el compromiso del riñón afectado con
extensión del daño a los tejidos perinéfricos, así como la
apariencia normal del riñón contralateral, lo cual fue crucial
para determinar la terapia apropiada. En la población
adulta las opciones terapéuticas han evolucionado con los
años, mostrando que la intervención médica y terapéutica
agresiva precoz es clave para el éxito. La mayoría de los
autores recomiendan usar antibióticos de amplio espectro y
nefrectomía urgente.
15-17
Otros sugieren que la nefrostomía
percutánea permite drenar el pus al tiempo que preserva la
masa y función renal,
18,19
aunque otros sostienen que dicho
procedimiento no preserva la función renal ni reduce la
morbilidad.
20
La extrema rareza de la enfermedad en la población
pediátrica diculta el establecimiento de protocolos. Es
importante destacar que la terapia debe ser individualizada
en cada paciente basada en el estado general, respuesta
al tratamiento médico y el nivel de funcionalismo renal.
En nuestra paciente, la afectación del estado general y el
compromiso del parénquima renal justicaron la nefrectomía
de urgencia. Coincidimos con los que sugieren el drenaje
percutáneo del pus y el tratamiento agresivo de la infección
para intentar mejorar las condiciones generales del paciente
y completar la evaluación funcional del riñón antes de
decidir nefrectomía, así como en quienes se demuestre
atroa renal con el n de diferir dicho procedimiento hasta
que desaparezcan los signos de inamación, lo que limitará
las adherencias perirrenales y facilitará la cirugía.
CONCLUSIONES
Los autores declaran no tener ningún conicto de
interés.
CONFLICTO DE INTERÉS
Se guardó estricta condencialidad de la historia
clínica, el uso de los datos de la misma fue solo para nes
académicos.
DECLARACIONES ÉTICAS
El presente artículo no recibió nanciamiento alguno.
FINANCIACIÓN